Eyaculación retrógrada: Qué es, Consecuencias y Tratamiento

La eyaculación retrógrada es cuando el semen no sale por la uretra del hombre durante el orgasmo, sino que va hacia la vejiga y se almacena junto a la orina.

Se trata de una afección que causa infertilidad masculina, por lo que los varones con dicho trastorno necesitan tratamiento especializado para tener hijos.

Consecuencias de la eyaculación retrógrada ¿Es malo?

La eyaculación retrógrada no es mala para la salud del hombre. Una persona con dicha afección puede llevar una vida normal.

No obstante, como la eyaculación sin semen puede ser seca, algunos varones buscan ayuda especializada para sentirse más cómodos durante las relaciones sexuales.

En cambio, la eyaculación retrógrada sí es una causa importante de infertilidad y trae como consecuencia imposibilidad para lograr el embarazo.

Ten en cuenta que al no salir el semen por la uretra, los espermatozoides nunca pueden llegar a la vagina de la mujer para encontrarse con el óvulo y fecundarlo.

Por tanto, un hombre con este problema requiere tratamiento para embarazar a una mujer y tener bebés.

Causas de la eyaculación retrógrada

La eyaculación retrógrada es causada porque el músculo que abre y cierra la vejiga, permanece abierto durante el orgasmo. Por eso, en lugar de que el semen siga su recorrido hacia la uretra entra a la vejiga y allí se almacena hasta que el hombre orina.

A su vez, la disfunción de dicho músculo (esfínter vesical) puede deberse a varias causas como:

Cirugías de próstata, vejiga y de ganglios linfáticos u otras estructuras cercanas a los órganos sexuales masculinos.
Enfermedades como diabetes mellitus, Parkinson y esclerosis múltiple.
Daños en la columna vertebral por accidentes.
Efectos secundarios de medicamentos utilizados para tratar la presión sanguínea alta (hipertensión arterial) y el agrandamiento de la próstata (hiperplasia prostática benigna).
Consecuencia del uso de medicinas para tratar problemas de la uretra.

Síntomas de la eyaculación retrógrada

El síntoma fundamental de la eyaculación retrógrada es la poca cantidad o ausencia de semen durante el orgasmo masculino.

Además, debes sospechar dicha afección cuando:

Tu orín es turbio después de tener relaciones sexuales. Esto se debe a que el semen se mezcla con la orina dentro de la vejiga.
No has embarazado a ninguna mujer, a pesar de tener sexo sin protección durante 1 año o más tiempo.

Tratamiento de la eyaculación retrógrada ¿Se puede corregir?

Generalmente, si al hombre no le molesta su problema de eyaculación y ya tiene hijos o no desea tener bebés, no es necesario indicar ningún tratamiento.

En el caso de que la eyaculación retrógrada sea resultado de cirugías de próstata o vejiga, no se puede corregir la afección. Esto se debe a que existe un daño en el músculo esfínter de la vejiga, consecuencia de la manipulación quirúrgica.

Cuando el mal funcionamiento de dicho músculo es ocasionado por diabetes mellitus, esclerosis múltiple o Parkinson, se pueden usar medicamentos para mejorar su función como:

Imipramina
Pseudoefedrina
Clorfeniramina

Tratamiento para la infertilidad

Existen tres opciones fundamentales para tratar la infertilidad en varones con eyaculación retrógrada que desean tener hijos.

La primera es intentar obtener los propios espermatozoides del hombre para utilizarlos en la inseminación artificial (IA) o en la fecundación in vitro (FIV), según las características de cada pareja.

También existe la posibilidad de extraer las células sexuales masculinas directamente de los testículos mediante una punción.

Si fallan las alternativas anteriores, se puede recurrir a la inseminación con esperma de donante, en la cual se utiliza semen donado para conseguir el embarazo.

Obtención del semen propio para IA o FIV

Generalmente, en la eyaculación retrógrada se expulsa una pequeña cantidad de semen o ninguna durante el orgasmo, por lo que es casi imposible que se logre el embarazo sin tratamiento.

Para estos casos, los especialistas en fertilidad recomiendan que el hombre no tenga relaciones sexuales durante 2-4 días. La finalidad es acumular una cantidad de semen mayor a la usual y así aumentar el volumen de la eyaculación.

También le indicarán consumir bicarbonato en los días previos a la obtención de los espermatozoides, con el objetivo de eliminar la acidez de la orina y preservar las células sexuales masculinas.

El día de la obtención de los espermatozoides el hombre debe acudir a la clínica de fertilidad, donde se le explica todo el procedimiento y se le ofrecen 2 frascos estériles.

El primer paso para obtener el semen es masturbarse con la vejiga vacía y depositar la muestra en uno de los frascos.

Después de la masturbación el hombre debe orinar en el segundo frasco para recolectar los espermatozoides que en lugar de salir por la uretra, se introdujeron en la vejiga.

Ambos frascos se llevan al laboratorio para obtener un volumen de esperma adecuado y poder utilizarlo en una de las dos técnicas de reproducción asistidas disponibles:

Inseminación artificial
Fecundación in vitro

La elección de una u otra técnica depende de las características de cada pareja y es algo que se valora en conjunto con los especialistas de fertilidad.

Punción testicular

Es un procedimiento sencillo, en el cual se usa anestesia local para evitar el dolor y las molestias.

El especialista introduce una aguja muy delgada en el testículo y aspira los espermatozoides de los túbulos seminíferos, donde normalmente se encuentran almacenados.

La muestra se lleva al laboratorio y se eligen los espermatozoides maduros con mayor movilidad.

Las células sexuales obtenidas por punción testicular generalmente se utilizan para un tipo de fecundación in vitro, conocida como inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI).

Inseminación artificial con semen de donante

En los hombres que no se puede obtener una muestra de semen propio, la inseminación artificial con esperma de donante es la tercera opción de tratamiento.

Para ello, tanto el hombre con eyaculación retrógrada como su pareja deben asistir a un centro de reproducción asistida, donde los especialistas le explicarán el proceso y cómo se elige al donante.

Generalmente, cada clínica tiene un banco de esperma, que agiliza el procedimiento y garantiza la calidad de los espermatozoides.

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