Tipos de fecundación in vitro ¿Cuál te conviene?

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Existen 8 tipos de fecundación in vitro (FIV): convencional, natural, ICSI, fertilización con embrión único, FIV de embriones congelados, con óvulos o espermatozoides de donante y fecundación con estimulación ovárica mínima.

Afortunadamente, la fertilización in vitro se ha desarrollado significativamente, y en la actualidad muchas personas con infertilidad pueden tener hijos gracias a esta opción de tratamiento.

Tipos de fecundación in vitro

8 Tipos de fecundación in vitro en infografía blanca y verde

Todos los tipos de fecundación in vitro tienen el mismo objetivo: lograr el embarazo. No obstante, es necesario elegir la opción más adecuada para cada persona.

Si estás considerando este tratamiento para tener hijos, deberías consultar a un especialista en fertilidad, que es el profesional indicado para evaluarte y determinar cuál es el tipo de fertilización más conveniente para tu caso.

1. Fecundación in vitro convencional o FIV simple

La FIV convencional es el tipo de fecundación que se utiliza con mayor frecuencia en clínicas de fertilidad de todo el mundo.

Básicamente, consiste en extraer los óvulos maduros del cuerpo de la mujer y llevarlos a un laboratorio, donde se mezclan con los espermatozoides en un recipiente estéril para que ocurra la fecundación.

La fertilización tiene lugar cuando el óvulo es fecundado por un espermatozoide. Una vez que ambas células se unen, se forma el huevo o cigoto, el cual debe crecer en el laboratorio por 5 o 6 días hasta convertirse en un embrión apto para ser transferido al útero de la mujer.

De manera general, la fecundación in vitro convencional debe cumplir con las siguientes etapas:

  • Estimulación ovárica: se utilizan hormonas inyectadas y medicamentos para que la mujer produzca más óvulos de lo normal, que serán utilizados en el procedimiento.
  • Extracción de los óvulos: cuando los óvulos están maduros, el especialista los extrae del cuerpo femenino a través de un procedimiento conocido como aspiración folicular.
  • Preparación del semen: en el laboratorio se eligen los mejores espermatozoides para aumentar las probabilidades del embarazo.
  • Fecundación: en un recipiente estéril se unen los espermatozoides con el óvulo para favorecer el proceso de fertilización, el cual ocurre cuando un espermatozoide entra al óvulo.
  • Cultivo de embriones: después de la fecundación el cigoto se divide constantemente hasta formar una estructura de varias células conocida como embrión, la cual se cuida en el laboratorio para monitorear su desarrollo.
  • Transferencia de embriones: en una FIV convencional se obtienen varios embriones, ya que se fecunda más de un óvulo. Generalmente, el especialista elige de 1 a 3 embriones y los deposita cuidadosamente en el útero de la mujer.

Si la fertilización in vitro es exitosa, al menos uno de estos embriones se implanta y ocurre el embarazo.

2. Fecundación in vitro natural (FIV natural)
Como su nombre lo indica, este tipo de fertilización in vitro es natural, ya que se utiliza el óvulo de mayor calidad que la mujer produce durante el ciclo menstrual, sin usar hormonas ni medicamentos para estimular los ovarios.

Normalmente, cada mes se desarrollan entre 15 y 20 óvulos en los ovarios, de los cuales solo 1 o dos maduran adecuadamente y se liberan hacia las trompas de Falopio durante la ovulación.

Esto es muy importante para este tipo de fecundación, ya que se utilizan los ovocitos que la mujer produce de manera natural.

Para extraerlos del cuerpo femenino se usa una técnica conocida como aspiración folicular, que básicamente consiste en introducir un catéter muy fino por la vagina, guiado por un ultrasonido para puncionar los ovarios y obtener los óvulos.

Se trata de un procedimiento muy sencillo, que no duele y que se realiza bajo sedación para minimizar las molestias de la mujer.

Luego, las células extraídas se llevan al laboratorio donde se mezclan con los espermatozoides para que ocurra la fecundación.

Al contrario de otros tipos de fecundación in vitro, en este caso no se utilizan medicamentos ni hormonas para estimular la liberación de los óvulos. Un punto muy favorable que beneficia a mujeres que quieren tener hijos pero deben evitar la estimulación ovárica.

La fertilización in vitro natural se indica fundamentalmente en los siguientes casos:

  • Parejas o mujeres que deseen una fecundación lo más natural posible
  • Mujeres con antecedentes de cáncer
  • Mujeres con buena reserva ovárica
  • Antecedentes de enfermedades en las trompas de Falopio
  • Hombres con problemas de fertilidad (infertilidad por factor masculino).

3. Fecundación in vitro con transferencia de embriones congelados (FET)

Para este tipo de fertilización in vitro se utilizan los embriones congelados, que fueron obtenidos en un ciclo anterior.

Dichos embriones se congelan mediante un proceso conocido como vitrificación embrionaria, el cual permite que las células permanezcan viables y seguras para usarse en el momento planificado.

Afortunadamente, los estudios científicos realizados demuestran que la fecundación con embriones congelados tienen una efectividad similar a la fertilización natural.

Por ello, la FET se ha convertido en una opción adecuada para:

  • Personas que presentan problemas de salud de manera imprevista durante un ciclo de fertilización in vitro y necesitan guardar sus embriones para usarlos en otro momento.
  • Parejas o personas que desean tener hijos a una edad más avanzada y eligen guardar sus embriones para concebir en el futuro.
  • Antecedentes de enfermedades genéticas personales o familiares, ya que se le puede hacer un examen genético al embrión congelado para conocer si es portador del gen de una enfermedad específica.
  • Mujeres con un endometrio poco preparado (capa interna del útero donde se implanta el embrión). La fecundación con embriones vitrificados permite elegir el momento óptimo del endometrio para favorecer la implantación y el embarazo.
  • Personas o parejas a las cuales le sobraron embriones después de la fecundación in vitro y desean guardarlos para un futuro embarazo.
  • Mujeres con riesgo de desarrollar un síndrome de hiperestimulación ovárica (SHO). En estos casos se prefiere congelar los embriones para usar en otro ciclo cuando el estado de salud lo permita.

4. Fertilización in vitro con transferencia electiva de un solo embrión (eSET)
En este tipo de fecundación in vitro se transfiere un único embrión a la cavidad uterina de la mujer.

Es decir, el especialista en lugar de transferir de 1 a 3 embriones, como se hace habitualmente, solo coloca uno en el útero de la mujer.

Es importante resaltar que, este tipo de fecundación es apropiada cuando las condiciones de fertilidad son favorables para lograr el embarazo con un solo embrión.

De manera general, la fecundación in vitro con transferencia de embrión único es una opción recomendable en los siguientes casos:

  • Mujeres menores de 35 años
  • Personas o parejas que desean evitar un embarazo múltiple (gestación de mellizos, trillizos o más bebés)
  • Parejas que hayan logrado el embarazo por fecundación in vitro en una ocasión anterior.

5. Fecundación in vitro con inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI)

La inyección intracitoplasmática de espermatozoides, también conocida por sus siglas en inglés ICSI, es uno de los tratamientos más efectivos para tratar la infertilidad.

Comúnmente, en los demás tipos de fertilización in vitro, el óvulo se coloca en una placa de laboratorio (recipiente estéril) junto a los espermatozoides y se espera hasta que un espermatozoide penetre en el óvulo para fertilizarlo.

En cambio, en la ICSI, el especialista introduce el espermatozoide directamente dentro del óvulo mediante una aguja muy fina especial para inyección intracitoplasmática.

De esta manera se procede con cada óvulo disponible, aumentando así las probabilidades de conseguir embriones, que posteriormente se transferirán al útero de la mujer para lograr el embarazo.

La ICSI es particularmente beneficiosa para tratar la infertilidad de origen masculino. También ha demostrado ser una opción muy efectiva cuando el problema de fertilidad es de causa desconocida.

Además, la inyección intracitoplasmática de espermatozoides es la opción más indicada en las condiciones siguientes:

  • Esperma de mala calidad
  • Muestra con pocos espermatozoides
  • Problemas para eyacular como eyaculación retrógrada y ausencia de eyaculación
  • Mujer mayor de 35 años
  • Personas o parejas que ya han realizado fertilización in vitro natural sin lograr el embarazo.

6. Fecundación in vitro con óvulos de donante
Para realizar este tipo de fertilización in vitro se utilizan los óvulos de una donante, ya que la mujer que desea quedar embarazada no puede ofrecer los suyos por diferentes motivos como:

  • Edad avanzada (más de 35 años)
  • Reserva ovárica disminuida (la mujer tiene muy pocos óvulos)
  • Ovarios extirpados por enfermedad
  • Fallo en la función de los ovarios (menopausia precoz)
  • Posibilidad de transmitir una enfermedad genética al bebé.

Esta fecundación in vitro es más sencilla para la mujer que desea convertirse en madre, porque no tiene que recibir estimulación ovárica y tampoco debe pasar por el proceso de aspiración folicular.

Los óvulos donados para el tratamiento son cuidadosamente seleccionados para garantizar que estén completamente saludables.

Todas las clínicas e instituciones de fertilidad confiables tenemos protocolos que establecen las condiciones requeridas para donar ovocitos. Estas son algunas de las más importantes:

  • Tener una edad entre 18 y 30 años
  • Contar con buen estado de salud emocional y físico
  • No padecer enfermedades crónicas como diabetes mellitus o presión arterial alta
  • Tener un cariotipo normal, (estudio genético que incluye a todos los cromosomas de la persona).

Así que, tu pareja y tú, pueden estar tranquilos si les sugieren la fecundación con óvulos de donante, ya que es una opción de tratamiento muy segura.

7. Fecundación in vitro con estimulación mínima (Mini FIV)

Esta fecundación in vitro se caracteriza por una estimulación ovárica más ligera y menos invasiva para la mujer.

Para su realización se utilizan dosis de hormonas significativamente menores a las que se usan en la fertilización in vitro convencional. Por lo que, esta opción de tratamiento es ideal para:

  • Mujeres con antecedentes de síndrome de hiperestimulación ovárica
  • Infertilidad de causa tubárica (por alguna afección en las trompas de Falopio)
  • Problemas de fertilidad de poco tiempo de evolución
  • Mujeres que desean un tratamiento con menos inyecciones
  • Personas que desean obtener solo los óvulos necesarios, ya que por cuestiones religiosas quieren evitar la formación de embriones adicionales.

8. Fecundación in vitro con esperma de donante

La FIV con esperma de donante es un proceso similar a la fertilización in vitro con óvulos donados, pero en este caso las células donadas son los espermatozoides.

Las indicaciones más frecuentes de este tipo de fecundación incluyen:

  • Casos de infertilidad masculina severa
  • Hombres con enfermedades genéticas que se pueden transmitir al bebé a través de sus espermatozoides
  • Mujeres sin pareja masculina que desean convertirse en madres.

Si te encuentras en alguno de los grupos mencionados, probablemente tu especialista ya te habló sobre la opción de la fecundación con espermatozoides de donante.

Al igual que para la donación de óvulos, los hombres que ofrecen sus espermatozoides para tratamientos de fertilidad tienen que cumplir requisitos muy estrictos.

La idea es que si una persona necesita utilizar espermatozoides donados, tenga acceso a células de óptima calidad que permitan tener un bebé saludable.

Por tanto, las condiciones fundamentales que debe cumplir un donador de esperma son:

  • Edad entre 18 y 35 años
  • Buen estado de salud físico y mental
  • Exámenes negativos para enfermedades de transmisión sexual como Hepatitis B, C, sífilis o VIH.

Estos son algunos de los requisitos más importantes, pero cada clínica tiene condiciones específicas para la donación de esperma.

Todo ello, para garantizar que el semen donado tenga las mejores características y favorecer a las personas que decidan concebir mediante esta opción de tratamiento.

 

Un especialista en fertilidad puede ayudarte a elegir el tipo de fecundación adecuado para ti

Si tienes dificultades para lograr el embarazo, te sugerimos buscar ayuda especializada para conocer la causa del problema.

Una vez identificado el origen de la infertilidad, tu doctor te sugerirá un tratamiento específico, que pudiera ser alguno de los tipos de fecundación in vitro que hemos comentado anteriormente.

En FertilT atendemos personas con problemas de fertilidad y las ayudamos a lograr el embarazo. Agenda una cita con nosotros para analizar tu caso.

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